Los instrumentos astronómicos utilizados en este semillero (curso) cumplen con tres criterios: su construcción y uso debe tener un bajo nivel de dificultad, proporcionan algún tipo de información en actividades practicas y el costo de producción no debe ser elevado.
Este antiguo instrumento esta conformado por una placa en forma de cuarto de circunferencia (razón por la cual recibe el nombre de cuadrante), una plomada y mirilla. La placa tiene grabados los ángulos de 0 – 90°, del vértice de la placa cuelga la plomada y encima de donde está anclada la plomada se ubica la mirilla, ademas se puede agregar algún mecanismo para facilitar su agarre.
El cuadrante ha sido principalmente en la astronomía y la navegación; el cuadrante astronómico permite medir la altura de los astros, tal vez su aparición mas notoria fue en siglo XVI por el astrónomo Danes Tycho Brahe, quien construyo algos con incluso dos metros de radio los cuales permitieron obtener mediciones más precisas, mismas que luego ayudaron a Keples a determinar la forma elíptica que tienen las órbitas de los planetas; mientras que la importancia del cuadrante náutico radica en que permite determinar la latitud.
El sextante es un instrumento que permite medir ángulos entre dos objetos tales como dos puntos de una costa o un astro, generalmente el Sol, y el horizonte. Conociendo la elevación del Sol y la hora del día se puede determinar la latitud a la que se encuentra el observador. Esta determinación se efectúa con bastante precisión mediante cálculos matemáticos sencillos a partir de las lecturas obtenidas con el sextante.
Para medir la altura de un astro se coloca el sextante perpendicularmente y se orienta el instrumento hacia la línea del horizonte (donde se junta el mar y el cielo). Acto seguido se busca el astro a través de la mira telescópica, desplazando el espejo móvil hasta encontrarlo. Una vez localizado, se hace coincidir con el reflejo del horizonte que se visualiza directamente en la mitad del espejo fijo. De ese modo se verá una imagen partida, en un lado el horizonte y en el otro el astro; como resultado se obtienen datos de la posición del astro.
La esfera armilar, modelo reducido del cosmos desde la perspectiva terrestre, es un instrumento astronómico utilizado en la Antigüedad y en la Edad Media para la determinación de la posición de los cuerpos celestes. Se desconoce su autor, pero se le asocia a varios astrónomos antiguos, incluyendo a Ptolomeo.
Su uso se circunscribió a la enseñanza de la astronomía y la navegación. Su construcción requirió de numerosas y minuciosas observaciones, durante siglos, sobre el movimiento aparente de los astros en torno a la Tierra.
En el ámbito de la astronomía se denomina paralaje estelar al efecto de paralaje en las estrellas distantes. Es paralaje en una escala interestelar, y puede ser utilizado para determinar la distancia desde la Tierra a otra estrella en forma directa utilizando astrometría de precisión.
El paralaje es por lo general producto de las diferentes posiciones que ocupa la Tierra en su órbita, que hace que las estrellas próximas parezcan que se desplazan con respecto a las estrellas más distantes. Al observar la paralaje, midiendo ángulos y utilizando elementos de geometría, se puede determinar la distancia a distintos objetos en el espacio, como ser estrellas y planetas. Aunque este instrumento no permite medir distancias a una escala interestelar, permite asimilar el concepto de paralaje a una pequeña escala.
Es un instrumento usado desde tiempos muy remotos con el fin de medir el paso de las horas, minutos y segundos. Tiempo. Emplea la sombra arrojada por un gnomon o estilo sobre una superficie con una escala para indicar la posición del Sol en el movimiento diurno. El reloj vertical es un conjunto de relojes solares con el plano del reloj perpendicular al horizonte del lugar. En cambio los horizontales son paralelos al horizonte del lugar. La división del día en 24 horas, así como también el año de 365 días, se lo debemos a los antiguos egipcios. Es posible que el sistema de horas se estableciera en aquellas sociedades por motivos religiosos, pues la palabra egipcia correspondiente a hora equivalía también a “deber sacerdotal”, palabra de la misma raíz que “vigía de las estrellas” (o vigía del tiempo). Estos vigilantes de las estrellas desempeñaban sus deberes sacerdotales anotando la aparición de los decan (determinadas estrellas o constelaciones) en el horizonte oriental. Dividían la noche en doce horas, de intervalos iguales, y se señalaba cada hora por la aparición del decan correspondiente.
El visor de posición solar en un instrumento comúnmente utilizado para estudiar el movimiento aparente del Sol en la bóveda celeste; el visor de posición consiste en un cristal protegido con un filtro de sol (puede ser polarizado) que permite, con ayuda de un reloj, ver la posición aparente del sol a determinada hora del día durante un periodo de tiempo prolongado. Para el correcto funcionamiento el visor trae una marca de referencia que permite saber desde qué posición se está tomando datos.